Comenzaré este post comentando algo que todas nosotras sabemos: las mujeres ocupamos solo un 16% de los puestos directivos en las empresas españolas.
A nosotras se nos tienen en cuenta factores que nada tienen que ver con nuestra valía como profesionales y nuestra apariencia tiene un carácter casi subliminal.
Puede parecerte justo o no, pero una vez que aceptas esta realidad, te resultará mucho más sencillo tomar ventaja de la situación.
Así que aquí van una serie de consejos que espero que os ayuden a la hora de enfrentaros a una entrevista de trabajo o una reunión importante.
VESTUARIO
Obviamente depende de la situación en la que te encuentres o el tipo de trabajo al que optes, pero yo te recomiendo llevar un traje o vestido en colores neutros y que aproveches los (pocos) complementos que utilices para dar una nota de color (recuerda, menos es más).
Tampoco utilices unos zapatos con un tacón altísimo si no eres capaz de de andar con ellos con naturalidad, es mejor que optes por unos más bajitos que te permitan estar igualmente elegante.
Con respecto al bolso, ten en cuenta que este no es el momento de lucir tu precioso maxi bolso, no quieres llamar la atención sobre él, si no sobre ti.
Opta mejor por un bolso de tamaño mediano y si no tiene suficiente capacidad, utiliza un portafolio para tener los documentos más a mano.
A continuación os muestro un par de ejemplos de outfits siguiendo las reglas que os he comentado
MAQUILLAJE
Utiliza un maquillaje neutro que te de una imagen saludable y lleva el pelo limpio y un peinado sencillo.
Tus manos son tu carta de presentación, debes hidratarlas y llevar las uñas cortas, limpias y si te gusta llevarlas pintadas, de un color discreto.
Recuerda: en este momento necesitas transmitir seguridad en ti misma y para ello debes sentirte cómoda en tu piel, tanto con tu maquillaje como con tu outfit.
ACTITUD
– Respira profundo para liberar ansiedad antes de comenzar.
– Procura estar con la espalda recta.
– Apaga el teléfono
– Mantén una sonrisa auténtica sin forzarla.
– Si llevas un bolso o cartera de mano, sostenla con la mano izquierda, así evitarás que la derecha esté húmeda al saludar a tus interlocutores.
– Presta toda tu atención, especialmente a los nombres, y pide que repitan lo que no entiendas, porque pedirlo después, dará la impresión de que no prestaste atención a nada.
– No invadas el espacio personal de las otras personas (un poco más de la distancia del brazo extendido).
– Realiza gestos abiertos en vez de cruzar los brazos o las piernas al nivel de los tobillos.
– Habla de manera correcta, con educación y respeto y a una velocidad adecuada (ni muy rápido ni muy despacio).
– No entres en temáticas que puedan causarte problemas: política, religión, fútbol, etc.
Y como último consejo: trata de ser tú misma, actúa de manera natural, no solo eres una trabajadora si no también, miembro de un equipo y tu personalidad puede ser un factor decisivo.
La diferencia la marca una actitud optimista y proactiva acompañada del correcto cuidado de la imagen personal.